Todos queremos ir de vacaciones, el descanso es fundamental cuando trabajas durante el año y más cuando te dedicas a una profesión que exige tanto como la hostelería. Si además, también eres tu propio jefe, seguro que tus horarios son muy largos y estás deseando contar con algunos días de relax.

Elegir las mejores fechas para irse de vacaciones teniendo un bar, no es una ciencia exacta, todo va a depender de varios factores como: la localización de tu bar, si trabajas solo o tienes socios, si tienes empleados y también de cuánto tiempo vas a estar dispuesto a cerrar.

En cualquier caso, recuerda que no se trata solo de ganar dinero, sino que también hay que darse un respiro para seguir rindiendo al máximo.

Bares en zonas turísticas

Si tu bar está situado en una zona turística no te podrás coger vacaciones en temporada alta, así que, olvídate del verano, puentes o de las fiestas señaladas durante el año, porque serán los momentos en los que más trabajo tengas.

A cambio, podrás disfrutar de unas vacaciones más económicas, si lo que deseas es sol y playa siempre te quedará la opción de visitar algún país tropical para tener todo el calor y el mar que deseas. Octubre y noviembre, junto a febrero y marzo, suelen ser los meses más adecuados para irse de vacaciones si el bar está en zonas turísticas, ya que, es cuando hay menos visitantes.

En cualquier caso, cada zona tiene sus características y hay destinos que tienen gente todo el año, con lo cual no hay una temporada baja propiamente dicha y otra que por sus particularidades tienen más gente en invierno que en verano, como las zonas de estaciones de esquí. Por eso, siempre hay que adaptarse a las particularidades del lugar en el que se ha instalado el negocio para disfrutar sin perder dinero.

Bares de barrio

Si tienes un bar de barrio de los de toda la vida estás de suerte, puedes elegir el momento que prefieras para irte de vacaciones. En realidad, todo va a depender de qué quieras hacer en tu tiempo libre:

  • Si buscas un destino de playa. Entonces no lo dudes y cierra tu negocio unos días en verano. Un bar de barrio no suele tener visitas en esas fechas, muchos de sus clientes están disfrutando de sus días libres. Podrás cambiar la barra y colocarte en el lado del cliente en el chiringuito junto al mar, disfrutando de ser el cliente. Un cambio que siempre viene bien y que, además, puedes aprovechar para observar como funcionan otros locales y coger buenas ideas para el propio.
  • Si quieres unas vacaciones baratas. Entonces deberás de coger tus vacaciones fuera de los meses de verano. Te recomendamos que viajes a partir de octubre, evitando los puentes, verás como los precios bajan mucho y tú podrás darte un capricho por un 30% menos, como mínimo, que en agosto. La ventaja de los bares de barrio es que suelen tener una clientela fiel y aunque te vayas unos días no pasará nada. Con lo que ahorras te compensará perder un poco más de dinero que si hubieras cerrado en agosto y podrás darte un viaje de lujo. Disfruta de destinos como Canarias en octubre, cuando no hay tanta gente y el tiempo sigue siendo agradable y paga mucho menos por tus billetes y por tu hotel.

¿Dejar el bar en otras manos?

Si quieres coger las vacaciones con amigos que no trabajan en la hostelería es frecuente que tengas que ser tú quién se adapte a ellos y a las vacaciones que les dan en su empresa. Cuadrar fechas no suele ser fácil.

Una opción para irse de vacaciones en cualquier momento es dejar en local en otras manos. Esto puede ser una buena idea si se tienes un empleado de gran confianza con el que trabajas durante todo el año o un familiar que conoce a fondo el funcionamiento del negocio, alguien de quien te puedas fiar al cien por cien. Pero, si tienes que contratar a una persona exclusivamente para cerrar los días que prefieras, te aconsejamos que cierres.

Resulta más sencillo coger vacaciones cuando cuentas con otros socios que trabajan en tu establecimiento, ya que uno de los dos puede quedarse al frente del bar o restaurante, siempre es más sencillo poder contar con días libres. Hay que dejar claras de antemano las normas, como por ejemplo si se pueden o no coger vacaciones en determinadas fechas, así todo funcionará bien.